Si te haces fiador de las deudas de otro, lo vas a lamentar; si te niegas a ser fiador de los demás, vivirás tranquilo. (Pr.11:15) PDT
El bienestar de nuestra familia, nuestra paz, y nuestra capacidad de pagar deudas justas, no deben someterse a riesgos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario