Por eso, deben esforzarse para añadir a su fe una buena conducta; a la buena conducta, el entendimiento; al entendimiento, el dominio propio; al dominio propio, la paciencia; a la paciencia, la devoción a Dios; a la devoción a Dios, el afecto fraternal; y al afecto fraternal, el amor. Si ustedes tienen estas virtudes y las desarrollan, estas los ayudarán a crecer y conocer más a nuestro Señor Jesucristo, y los harán más fructíferos y útiles. (2Pe.1:5-8) NBV
Resulta imposible conocer verdaderamente a Jesús si no se van sumando esas cualidades una a otra hasta llegar al amor.
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