Es necesario que él crezca, y que yo decrezca.(Jn.3:30)RVC
Cuando rendimos por completo el "yo", nuestra continua sumisión a Dios no nos parecerá ofensiva, porque estaremos actuando por nuestra propia y libre voluntad.
Cuando rendimos por completo el "yo", nuestra continua sumisión a Dios no nos parecerá ofensiva, porque estaremos actuando por nuestra propia y libre voluntad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario