Maltratado y humillado, ni siquiera abrió su boca; como cordero, fue llevado al matadero; como oveja, enmudeció ante su trasquilador; y ni siquiera abrió su boca. (Is.53:7) NVI
El primer y mayor error del ser humano ante cualquier dificultad es darle rienda suelta a su boca, y decir lo incorrecto.
El primer y mayor error del ser humano ante cualquier dificultad es darle rienda suelta a su boca, y decir lo incorrecto.