Nunca me eché para atrás a la hora de decirles lo que necesitaban oír, ya fuera en público o en sus casas.
He tenido un solo mensaje para los judíos y los griegos por igual: la necesidad de arrepentirse del pecado, de volver a Dios y de tener fe en nuestro Señor Jesucristo. (Hch.20:20-21)NTV
Si hablas basado en la verdad no temas ofender a la gente, teme ofender a Dios por callar.