Fijemos en Cristo

Fijemos nuestra mirada en Jesús, pues de él procede nuestra fe y él es quien la perfecciona. Jesús soportó la cruz, sin hacer caso de lo vergonzoso de esa muerte, porque sabía que después del sufrimiento tendría gozo y alegría; y se sentó a la derecha del trono de Dios. (Heb.12:2) DHH
No permanecemos en la iglesia por lo que hagan los hombres (que son imperfectos), sino porque mantenemos la mirada fija en Cristo, quien es perfecto y es el que está obrando en nosotros.

Heridas

Él sana a los de corazón quebrantado y les venda las heridas. (Sal.147:3) NTV
No te apartes de la iglesia por las heridas que causan los hombres, quédate por la sanidad que sólo Dios puede darte.

Lleno de Cristo

Y le dijo a la gente: Tengan cuidado y dejen toda avaricia. La vida de una persona no depende de las muchas cosas que posea. (Lc.12:15) NBV
El bolsillo puede llenarse de dinero, pero solo un corazón lleno de Cristo da verdadero valor al hombre.

Hombre de Dios

Yo soy quien te manda que tengas valor y firmeza. No tengas miedo ni te desanimes porque yo, tu Señor y Dios, estaré contigo dondequiera que vayas. (Jos.1:9) DHH
El hombre de Dios no ignora el miedo, lo vence confiando en el Señor.

Dominio Propio

Humildad y dominio propio. Contra tales cosas no hay ley. (Ga.5:23) PDT
La verdadera fuerza no está en los músculos, sino en el dominio propio.

Verdadero Hombre

Jesús lloró. (Jn.11:35) PDT
Si el Hijo de Dios lloró, un verdadero hombre no teme mostrar lo que siente.

Fuerza y Amor

Estén alerta, permanezcan firmes en la fe, pórtense varonilmente, sean fuertes. Todas sus cosas sean hechas con amor. (1Co.16:13-14) NBLA
Fuerza y amor; esa es la combinación que define al hombre de Dios.

En el Tiempo

Tal vez se pregunten: “¿Cómo sabremos si una profecía viene o no del Señor?". (Dt.18:21) NTV
El mensaje divino se prueba en el tiempo, no en las palabras.

Propia Condena

Pero todo profeta que falsamente afirme hablar en mi nombre o hable en nombre de otro dios, tendrá que morir. (Dt.18:20) NTV
Quien se atreve a usar el nombre de Dios para su engaño, carga su propia condena.

Peligrosa

Alaba, alma mía, al Señor, y no olvides ninguna de las cosas buenas que él te da. (Sal.103:2) NBV
La prosperidad es peligrosa si nos lleva a olvidarnos de Dios.

Sin Gratitud

No se te ocurra pensar: “Esta riqueza es fruto de mi poder y de la fuerza de mis manos.” (Dt.8:17) NVI
La prosperidad sin gratitud a Dios es un camino hacia la caída.

Verdadera Sabiduría

Reconozcan que el Señor es Dios; él nos creó y le pertenecemos. Nosotros somos su pueblo, las ovejas que él mismo cuida. (Sal.100:3) PDT
Reconocer a Dios como nuestro creador es el inicio de la verdadera sabiduría.